Uno de los mayores obstáculos para nuestro crecimiento espiritual es que solemos intentar cambiar lo que hacemos en vez de lo que somos. Estamos tan empeñados en hacer ajustes en lo que las personas ven, que olvidamos lo más importante: lo que sólo Dios puede ver.
Él (Dios) quiere que crezcamos espiritualmente, y para lograrlo necesitamos de su ayuda puesto que esta clase de transformación no es superficial, sino que ocurre dentro de nosotros.
Déjame compartir contigo cuatro características del verdadero crecimiento espiritual, aunque me encantaría escribir algunas más, siento que estás son de las más importantes.
1.El crecimiento espiritual se basa en el nuevo nacimiento, es decir, está basado en una salvación real. No podemos hablar de crecimiento si no tenemos vida espiritual, mucho menos si no hemos nacido de nuevo ni hemos recibido el perdón de Dios.
2. El crecimiento espiritual se basa en un conocimiento experiencial de la gracia de Dios. Es muy diferente saber cosas sobre él que conocerlo a él.
Tenemos mucha información sobre Dios, conocemos sus atributos, podemos citar la Palabra, hablar sobre lo que él ha revelado, pero ¿tienes una relación con Dios? ¿Lo conoces en privado?
3. El crecimiento espiritual genera una actitud de humildad.
Es contradictorio decir que estamos creciendo espiritualmente mientras somos orgullosos. Si lo que sabes de Dios es correcto, ese conocimiento debe llevarte a reflejar lo que él es.
4. El crecimiento espiritual viene como efecto de una transformación real. Dios nos recibe tal y como somos, pero nos ama demasiado como para dejarnos así, es por eso que él busca transformar nuestro interior y hacernos a su semejanza.
Me encantaría que siempre llevaras esta frase en tu corazón: “Debemos vivir con mentes transformadas para crecer espiritualmente”.
Living a true transformation
One of the biggest obstacles to our spiritual growth is that we often try to change what we do instead of who we are. We are so intent on making adjustments to what people see that we forget the most important thing: what only God can see.
He (God) wants us to grow spiritually, and to achieve this, we need his help since this kind of transformation is not superficial, but occurs within us.
Let me share with you four characteristics of true spiritual growth, although I would love to write a few more, I feel that these are among the most important.
1. Spiritual growth is based on the new birth, that is, it’s based on real salvation. We cannot talk about growth if we don’t have spiritual life, much less if we have not been born again and received God’s forgiveness.
2. Spiritual growth is based on an experiential knowledge of God’s grace. It’s very different to know things about him than to know him.
We have a lot of information about God, we know his attributes, we can quote the Word, talk about what he has revealed, but do you have a relationship with God? Do you know him privately?
3. Spiritual growth generates an attitude of humility.
It’s contradictory to say that we are growing spiritually while being proud. If what you know about God is correct, that knowledge should lead you to reflect on what he is.
4. Spiritual growth comes as an effect of real transformation. God receives us just as we are, but he loves us too much to leave us like this, that’s why he seeks to transform our inner selves and make us like him.
I would love for you to always carry this phrase in your heart: “We must live with transformed minds in order to grow spiritually.