Un perro, un gato o cualquier otro animal que decidamos adoptar no viene a sustituir a un integrante de la familia, sino a aportar a ella

Desde que recuerdo en mi casa hemos tenido mascotas, todos perros; primero fue Milky, luego Mustafá y después la Shokis, estos dos últimos estuvieron con nosotros hasta que no pudieron más, murieron de viejos, dejando a su paso una lista de entrañables recuerdos y la satisfacción de que disfrutaron la vida.

Y pese a tener conexión con ellos, no fue hasta que llegó Barack a mi vida que el lazo mascota-amo tomó un nuevo significado, ahora le llamo perrhijo, un término lleno de amor y responsabilidad, aunque también de una que otra crítica, pues no todos están preparados para reconocer que un perro, un gato o cualquier otro animal que decidamos tener es parte de la familia.

Los perros son seres inteligentes que sienten y demuestran sus sentimientos, son leales, entendidos y su función –según yo– no es otra más que existir para hacer más divertida la vida, como lo haría un niño de 2 años, mentalidad que, dicen los expertos, es la que los “lomitos” desarrollan a lo largo de su vida.

En mi caso, Barack –perro mestizo, de casi 4 años–, vino a descubrir una parte de mí que no sabía que existía, me ha hecho más empática, comprensiva y hasta más expresiva. Un perro te enseña a ser más humano y a estar más pendiente de las cosas que verdaderamente importan.

En este punto tengo que dejar claro que las mascotas no vienen a sustituir ningún amor o integrante humano de la familia, sino a aportar a ella, nos hace más cercanos y nos da innumerables temas de conversación, además de que nos hacen desarrollar la paciencia y la tolerancia, pues como ya lo he mencionado, es un pequeño niño de apenas dos años que está expectante, descubriendo la vida, aprendiendo de lo que sus humanos le muestran y a lo que él sólo sabe responder con amor y agradecimiento.

Un perrhijo no sustituye, es un integrante más de la familia y como tal debemos tratarlo.

It’s not just a pet

A dog, a cat or any other animal that we decide to adopt does not come to replace a member of the family, but to contribute to it

Ever since I can remember, we have had pets in our house, all dogs; first it was Milky, then Mustafa and then Shokis, the latter two were with us until they could not take it anymore, they died of old age, leaving behind a list of fond memories and the satisfaction that they enjoyed life.

And despite having a connection with them, it wasn’t until Barack came into my life that the pet-owner bond took on a new meaning. Now I call him “dog-child,” a term full of love and responsibility, but also a bit of criticism, since not everyone is prepared to recognize that a dog, a cat, or any other animal we decide to have been part of the family.

Dogs are intelligent beings that feel and show their feelings, they are loyal, knowledgeable, and their function – according to me – is none other than to exist to make life more fun, like a 2-year-old child would do, a mentality that, experts say, is what “puppies” develop throughout their lives.

In my case, Barack – a mixed breed dog, almost 4 years old – came to discover a part of me that I didn’t know existed, he has made me more empathetic, understanding and even more expressive. A dog teaches you to be more human and to be more aware of the things that truly matter.

At this point I have to make it clear that pets do not come to replace any love or human member of the family, but to contribute to it, they make us closer and give us countless topics of conversation, in addition to making us develop patience and tolerance, because as I have already mentioned, he is a little boy of barely two years old who is expectant, discovering life, learning from what his humans show him and to which he only knows how to respond with love and gratitude.

A dog child does not replace, it is another member of the family and as such we must treat it.

En un mundo con normas y reglas sociales, es posible combinar ambos conceptos, manteniendo la fe firme y los valores intactos

Iniciemos por explicar qué es Cultura. La Cultura es un término de hace referencia a la diversidad de significados que contienen diferentes manifestaciones humanas dentro de un contexto social, artístico, o industrial. Puede ser también el conjunto de saberes, creencias religiosas, costumbres o estilos artísticos que un grupo humano posee. Tambien pueden ser aquellas normas morales características de una sociedad y preservados de generación en generación a través de la enseñanza. Es decir, es todo aquello en la sociedad humana que no es de origen natural, sino que ha sido creado por el ser humano o sometido a algún proceso de transformación.

Por otro lado, la Fe es la creencia, confianza o aceptación de una persona en relación con algo o alguien y, como tal, se manifiesta por encima de la necesidad de poseer evidencias que demuestren la verdad de aquello en lo que se cree. La palabra proviene del latín fides, que significa ‘lealtad’, ‘fidelidad’. La Fe también significa tener confianza plena en algo o alguien. Es decir, es lo que cree una persona o una comunidad, y que puede tener una base moral, racional o sentimental. Por lo tanto es serle fiel a algo o alguien “pero por convicción propia”.

Y de ahí partimos. Seguramente has escuchado que: “La Fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve, y la confianza en Dios. ¿Entonces cómo poder combinar estos dos conceptos en tu diario vivir? Podemos encontrarnos dentro de un mundo determinado, con normas y reglas que la convierten en sociedad, pero justo ahí es donde cobra importancia el significado de la fe: “lealtad”, porque el hecho de que pertenezcas a una sociedad determinada no significa que sus culturas deban ser iguales, sino que, como su definición lo muestra, existe una diversidad, la conjunción de estos conceptos que ayudan a caminar a cualquier persona, a superarse. Sin embargo lo que debe de imperar son esos valores que hacen que tu fe no caiga no importando tu cultura o la cultura de la que estés rodeado.

Incluso yo diría al igual que el autor David Platt, podemos estar en un mundo lleno de culturas pero caminar contracultura, demostrando que no importa cuánta diversidad cultural exista, mi fe debe mantenerse firme, fuerte, no importando las circunstancias, ya que el resultado de ello detonará en otros mas que su fe sea su estandarte en todo tiempo y momento. En mi caso (quizá como muchos), mi fe está puesta en Dios, ya que he reconocido quien es Jesús y lo que ha hecho en mí, te propongo que investigues ¿Quién es Jesús y que puede hacer personalmente por ti?

Faith and diversity in harmony

In a world with social norms and rules, it is possible to combine both concepts, keeping faith strong and values intact.

Let’s start by explaining what Culture is. Culture is a term that refers to the diversity of meanings contained in different human manifestations within a social, artistic, or industrial context. It can also be the knowledge, religious beliefs, customs, or artistic styles a human group possesses. It can also be those moral norms characteristic of a society preserved from generation to generation through teaching. In other words, everything in human society is not of natural origin but has been created by humans or subjected to some transformation process.

On the other hand, Faith is the belief, trust, or acceptance of a person about something or someone, and, as such, it is manifested over and above the need to possess evidence that demonstrates the truth of what is believed. The word comes from the Latin fides, which means ‘loyalty’ or ‘fidelity’. Faith also means to have complete confidence in something or someone. It is what a person or a community believes and can have a moral, rational, or sentimental basis. Therefore, it is to be faithful to something or someone “but by one’s conviction.”

And that is where we start from. Surely you have heard that: “Faith is the certainty of what is expected, the conviction of what is not seen, and trust in God. So, how can you combine these two concepts in your daily life? We can find ourselves in a certain world, with norms and rules that make it a society, but that is where the meaning of faith becomes important: “loyalty” because the fact that you belong to a particular society does not mean that their cultures must be equal, but, as its definition shows, there is diversity, the conjunction of these concepts that help any person to walk, to overcome. However, what must prevail are those values that make your faith not fall, no matter your culture or the culture you are surrounded by.

I would even say, like the author David Platt, we can be in a world entirely of cultures but walk counterculture, demonstrating that no matter how much cultural diversity there is, my faith must remain firm, no matter the circumstances, since the result of this will detonate in others that their faith will be their standard at all times and moments. In my case (perhaps like many), my faith is placed in God. Since I have recognized who Jesus is and what He has done in me, I propose you investigate who Jesus is and what He can do personally for you.

Los gestos solidarios, desde pequeñas ayudas hasta grandes proyectos, benefician a todos, fomentando bienestar en la comunidad

Los actos de servicio son manifestaciones concretas de solidaridad y empatía que tienen un impacto significativo en la vida de las personas. Este tipo de acciones abarcan desde pequeñas ayudas cotidianas hasta grandes proyectos de voluntariado. Cuando hablamos de los actos de servicio estamos haciendo referencia a que todo lo que hacemos habla más alto que cualquier palabra.

Un acto de servicio es una acción realizada con la intención de beneficiar a otra persona o grupo, sin esperar una recompensa material a cambio. Estos actos pueden ser espontáneos o planificados y suelen surgir de la empatía, el altruismo y el deseo de contribuir al bienestar común.

Las características principales de los actos de servicio.

1. Intención desinteresada: La motivación principal es el bien de otros, no obtener beneficios personales.

2. Voluntariedad: Son acciones que se realizan libremente, sin obligación.

3. Impacto positivo: Tienen un efecto bueno tangible o intangible en las personas a quienes lo realizas.

Los servicios más pequeños realizados con amor y sin reproche pueden tener un significado impactante, ya que estos reflejan una disposición a contribuir al bienestar de alguien más. Hay muchas formas de tener actos de servicio. Podemos ayudar a otros económica, social, física y espiritualmente. Por ejemplo, podemos dar alimentos u otros artículos a quienes los necesiten; podemos brindarle amistad a un recién llegado, podemos cuidar de un enfermo, o consolar a quienes sufren.

Jesús nos da el ejemplo perfecto de servicio. Él explicó que no había venido para que le sirvieran sino para servir (Mateo 20:28). Cuando anduvo en la tierra, Él sirvió a todos sin excepción; alimentó a la gente hambrienta, sanó a los enfermos; una de las formas en que mostró su amor hacia nosotros fue haciendo actos de servicio

Los actos de servicio no solo benefician a quienes reciben la ayuda, sino también a quienes la brindan.

Entre los beneficios destacan:

• Mejora del bienestar emocional: Ayudar a otros puede incrementar los sentimientos de felicidad y satisfacción personal.
• Desarrollo personal: Fomenta habilidades como la empatía, la comunicación y el liderazgo.
• Inspiración y ejemplo: Los actos de servicio pueden motivar a otros a realizar acciones similares, creando un efecto multiplicador.

Los actos de servicio son una expresión genuina de la solidaridad humana y juegan un papel sumamente importante. Cada pequeño gesto de ayuda puede tener un gran impacto, demostrando que todos tenemos el poder de contribuir al bienestar colectivo.

Acts of service: solidarity and empathy

Gestures of solidarity, from small grants to large projects, benefit everyone, promoting well-being in the community.

Acts of service are concrete manifestations of solidarity and empathy that significantly impact people’s lives. These actions range from small, everyday help to large volunteer projects. When we talk about acts of service, we refer to the fact that everything we do speaks louder than words.

An act of service is an action performed to benefit another person or group without expecting a material reward in return. These acts can be spontaneous or planned and usually arise from empathy, altruism, and the desire to contribute to the common good.

The main characteristics of acts of service.

1.- Selfless intent: The primary motivation is for the good of others, not for personal gain.

2.- Voluntariness: They are actions that are performed freely, without obligation.

3. Positive impact: They have a tangible or intangible good effect on the people to whom they are performed.

Most miniature services performed with love and without reproach can have an impactful meaning, as they reflect a willingness to contribute to someone else’s welfare. There are many ways to have acts of service. We can help others financially, socially, physically and spiritually. For example, we can give food or other items to those in need, befriend a newcomer, care for a sick person, or comfort those suffering.

Jesus gives us the perfect example of service. He explained that He did not come to be served but to serve (Matthew 20:28). When He walked the earth, He served everyone without exception; He fed the hungry and healed the sick. One of the ways He showed His love for us was by doing acts of service (Matthew 20:28).

Acts of service benefit those who receive the help and those who give it.

Among the benefits are:

• Improved emotional well-being: Helping others can increase happiness and personal satisfaction.
• Personal development fosters skills such as empathy, communication, and leadership.
• Inspiration and example: Acts of service can motivate others to perform similar actions, creating a multiplier effect.

Acts of service are a genuine expression of human solidarity and play a vital role. Every small gesture of help can have a significant impact, demonstrating that we all have the power to contribute to the collective well-being.