Conocer a Dios a profundidad nos da la oportunidad de una nueva vida en Jesús
“En este mundo todo tiene su hora; hay un momento para todo cuanto ocurre: 4Un momento para llorar, y un momento para reír. Un momento para estar de luto, y un momento para estar de fiesta”.
Eclesiastés 3:1,4
Dios Habla Hoy:
El creador y señor de la vida es el de los comienzos; desde la fundación del mundo y la creación de los cielos y el universo, al que hace cada día, el que hace nacer y existir.
También es el que otorga el tiempo para todo, el nos da a través de su hijo Jesús los nuevos comienzos, él viene para darnos vida, con un corazón y una visión nueva en él.
Nos da fe por medio del Espíritu Santo y no por herencia y tradición religiosa.
Pero de todo lo que recibimos de su misericordiosa generosidad, lo verdaderamente importante es el conocimiento, pues todo esto es aprender de él y de su sabiduría, un conocer a Dios a profundidad, y a partir de la oportunidad de una nueva vida en Jesús, alinear nuestra mente y corazón a su voluntad, sólo así los nuevos comienzos tendrán éxito espiritual, como cuando se vuelve a él y se retoma la comunión íntima que se había perdido.
Volviendo al primer amor que el Señor está esperando.
It’s always time to start
Knowing God in depth gives us the opportunity for a new life in Jesus
“In this world, everything has its hour; there is a time for everything that happens: 4A time to weep, and a time to laugh. A time to mourn and a time to be merry.”
Ecclesiastes 3:1,4
God Speaks Today:
The creator and lord of life are one of the beginnings, from the foundation of the world and the creation of the heavens and the universe to the one who makes each day, the one who brings into being and into existence.
He also gives time for everything; he gives us new beginnings through his son Jesus; he comes to provide us with life, with a new heart and a new vision in him.
He gives us faith through the Holy Spirit and not by inheritance and religious tradition.
But of all that we receive from his gracious generosity, knowledge is essential, for all this is learning from him. His wisdom, a knowing God in depth, and the opportunity of a new life in Jesus, aligning our mind and heart to his will, only then will new beginnings be spiritually prosperous, as when one returns to him and resumes the intimate communion that had been lost.
Returning to the first love that the Lord is waiting for.