Además del pilar que representa, es una compañera de vida y una fuerza motriz en la comunidad
La identidad de las mujeres es el conjunto de características sociales, corporales y subjetivas que las distinguen de manera real y simbólica de acuerdo con la vida vivida.
Por ejemplo, la mujer sigue siendo la principal responsable de las tareas tradicionalmente asignadas por la sociedad, que son las más vinculadas con el cuidado del hogar, como la limpieza, el cuidado de la ropa o la preparación de comidas, mientras que el papel del hombre en estas tareas es secundario, al menos en el tiempo invertido en su realización.
Por otro lado, la identidad de la familia la caracterizan normas, patrones, costumbres y valores que definen la idiosincrasia y la tradición de la misma, y las cuales permiten diferenciarla de las demás.
Es por ello por lo que la familia constituye el espacio primario para la socialización de sus miembros, siendo en primera instancia el lugar donde se lleva a cabo la transmisión de los sistemas de normas y valores que rigen los individuos y a la sociedad como un todo.
Ahora bien, la familia va estimulando el sistema de diferenciación de valores y normas entre ambos sexos, asentando así tanto la identidad como el rol de género.
En el ámbito social, la mujer desempeña un papel fundamental, como un pilar en la familia, una compañera de vida y una fuerza motriz en la comunidad.
Actualmente para mantener una familia en todos los aspectos, la carga laboral de la mujer se ha duplicado, principalmente por un estado de necesidad, pues ella realiza roles de trabajo remunerado y trabajo no remunerado.
Por otra parte, las exigencias de la evolución, sobre todo en cuestión de la tecnología, las hace más necesarias para poder sobresalir y mantener una familia en todas sus necesidades (alimentarias, educación, habitación y recreación), pues juega un papel muy importante en la formación de hombres y mujeres de valores, futuros profesionistas en diversas áreas.
Es por todo lo anterior, que las mujeres son parte fundamental de una familia, pues formamos a quienes a quienes posiblemente puedan ser, en un futuro, presidente o presidenta de este país.
The identity of women in the family
In addition to the pillar she represents, she is a life partner and a driving force in the community
Women’s identity is the set of social, physical and subjective characteristics that distinguish them in a real and symbolic way according to the life they live.
For example, women continue to be primarily responsible for the tasks traditionally assigned by society, which are those most closely linked to home care, such as cleaning, caring for clothes or preparing meals, while the role of men in these tasks is secondary, at least in the time invested in their completion.
On the other hand, the identity of the family is characterized by norms, patterns, customs and values that define the idiosyncrasy and tradition of the family, and which allow it to be differentiated from others.
This is why the family is the primary space for the socialization of its members, being in the first instance the place where the transmission of the systems of norms and values that govern individuals and society as a whole takes place.
However, the family stimulates the system of differentiation of values and norms between both sexes, thus establishing both the identity and the gender role.
In the social sphere, women play a fundamental role, as a pillar in the family, a life partner and a driving force in the community.
Currently, in order to support a family in all aspects, the workload of women has doubled, mainly due to a state of need, since they perform roles of paid work and unpaid work.
On the other hand, the demands of evolution, especially in terms of technology, make them more necessary to be able to excel and support a family in all its needs (food, education, housing and recreation), since it plays a very important role in the formation of men and women of values, future professionals in various areas.
It is for all the above, that women are a fundamental part of a family, since we form those who may possibly be, in the future, president of this country.