¡Cómo ha sido difícil mantener una sana comunicación en medio de tanto estrés en estos tiempos!
Muchos matrimonios están fracasando porque cuando uno quiere decir algo, da a entender otra cosa y el cónyuge interpreta algo más.
Sobre este tema abundan las palabras en cuanto a la importancia de la comunicación, sólo deseo dejar en tu corazón algo que justo anoche Dios habló conmigo. Él me dijo: “Angie, tu matrimonio es de tres” (y me acordé del lazo en mi boda).
Lo anterior se refiere a que todos queremos una buena comunicación de pareja, pero es imposible lograrlo si no mantenemos una sana comunicación con Dios, lo cual es la clave.
Piénsalo conmigo; en nuestro tiempo de intimidad con Dios, él nos impregna su amor, su perdón, su paciencia, su compasión y su sabiduría, ¿qué mejores ingredientes para hablar a nuestro esposo?
Cuando nuestra oración es continua él nos muestra sus planes, nos inspira y renueva nuestra fe. Puede ser que estés al borde del desquicie con tu cónyuge, pero déjame darte un consejo de corazón: entra a ese cuarto secreto, ahí encontrarás las palabras para traer vida y unidad a tu matrimonio, ahí es donde está tu esperanza.
Communication in marriage
How difficult it has been to maintain healthy communication during so much stress these days!
Many marriages fail because when one wants to say something, they imply something else, and the spouse interprets something else.
On this subject, words abound regarding the importance of communication, and I just want to leave in your heart something that just last night God spoke to me. He said to me, “Angie, your marriage is a three-way marriage” (and I remembered the bond at my wedding).
The above refers to the fact that we all want good communication as a couple, but it is impossible to achieve it if we do not maintain healthy contact with God, which is the key.
Think about it with me; in our intimate time with God, he imbues us with his love, forgiveness, patience, compassion, and wisdom; what better ingredients to speak to our spouse?
When our prayer is continuous, he shows us his plans, inspires us, and renews our faith. You may be on the verge of falling apart with your spouse, but let me give you some heartfelt advice: go into that secret room, there you will find the words to bring life and unity to your marriage; that is where your hope lies.