Fuimos creados intencionalmente. Nuestros años adquieren valor sólo cuando nos hemos percatado de que existe un escenario preparado para que desempeñemos un papel protagónico, y que el papel que nos toca desempeñar está alineado al propósito divino.
No es nuestro trabajo, nuestro cónyuge, nuestros hijos, familia, educación, habilidades, dinero o logros lo que da valor a nuestros años, sino el entender que su propósito es lo que le da sentido a todo eso, pero sucede que por lo regular tenemos nuestros ojos puestos en lo que hay delante y no prestamos atención a la historia en la que se desenvuelven nuestras vidas.
Si queremos que los años de nuestra vida adquieran valor, procuremos descubrir lo que Dios está haciendo en el mundo y cómo nos hace partícipes de su obra, ya que él es el autor de la historia más grande escrita y en la cual encontramos el sentido y propósito más profundo de nuestro existir.
Llenemos nuestros años de valor entendiendo la profundidad que hay en el hecho de haber sido intencionalmente creados para desempeñar un papel protagónico en la maravillosa historia que Dios creó.
“Tus ojos vieron mi embrión, y en tu libro se escribieron todos los días que me fueron dados, cuando aún no existía ni uno solo de ellos”
Salmos 139:16 (LBLA)
The years value
We were intentionally created. Our years gain value only when we have realized that there is a stage set for us to play a leading role, and that the role we have to play is aligned with a divine purpose.
It’s not our job, our spouse, our children, family, education, skills, money or achievements that gives value to our years, but to understand that its purpose is what gives meaning to all that, but it happens that usually we have our eyes on what lies ahead and we are not paying attention to the story in which our lives unfold.
If we want the years of our life to gain value, let us try to discover what God is doing in the world and how he makes us participate in his work, since he’s the author of the greatest written history and in which we find the meaning and deeper purpose of our existence.
Let us fill our years of courage by understanding the depth of being intentionally created to play a leading role in the wonderful story that God created.
“Your eyes saw my unformed body; all the days ordained for me were written in your book before one of them came to be.
Psalm 139:16