Los matrimonios que logran esta conexión disfrutan de la mutua compañía y buscan el bienestar del otro sin esperar nada a cambio
Creo que a todas nos gusta tener amigos con los que podemos contar todo el tiempo, como se dice comúnmente “en las buenas y en las malas”, o sea, de manera incondicional, y lo mismo buscamos en la pareja
Los noviazgos generalmente se inician porque hay una atracción ya sea física o emocional, pero con el trato pueden llegar a ser grandes amigos y al consolidarse, se unen en matrimonio.
Algunos piensan que al casarse se termina esa amistad, y no debería de ser así, considero que los mejores matrimonios son aquellos que se enamoran, pero que también eligen seguir siendo amigos, porque se le puede seguir contando cualquier cosa, incluso nuestros pensamientos más profundos sin temor a ser rechazados.
Los matrimonios donde ambos logran ser muy buenos amigos tienen tantas cosas en común que disfrutan grandemente de la mutua compañía, siempre están buscando el bienestar del otro sin esperar nada a cambio.
En la verdadera amistad se puede encontrar confianza, comprensión, aliento, apoyo, solidaridad, risas, alguien con quien compartir triunfos y fracasos, además de un hombro para poder llorar. También buscamos quien se preocupe sinceramente, exhortación, consejo, plática… y así podemos seguir con una gran lista.
¿Quién considera usted que le conoce mucho mejor?
Así es, ese gran amigo es o puede ser nuestro esposo, el tiene que encabezar la lista de los mejores amigos. En la Biblia en el libro de Proverbios capítulo 17, versículo 17 dice “En todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia”, si nuestro esposo es nuestro mejor amigo tenemos la seguridad de que contamos con el en esos tiempos difíciles que en la vida se llegan a tener y sé que no me abandonará, sino que estará ahí a mi lado.
En muchas de las ocasiones los matrimonios no se dan cuenta del gran valor que es ser también amigos entre esposos. La Biblia dice en el libro de Cantares capítulo 5, versículo 16, “Tal es mi amado, tal es mi amigo”, una vez que la esposa alaba al esposo de todas sus cualidades se disfruta ser amigos todo el tiempo.
Friends all the time
Married couples who achieve this connection enjoy each other’s company and seek each other’s well-being without expecting anything in return
I think we all like to have friends we can count on all the time, as it is commonly said, “in good times and bad,” unconditionally, and we look for the same in our partners.
Courtships generally begin because there is an attraction, whether physical or emotional, but with treatment, they can become great friends, and when consolidated, they join in marriage.
Some think that when you get married, that friendship ends, and it shouldn’t be that way. The best marriages are those that fall in love but also choose to remain friends because you can continue telling them anything, even your most profound thoughts, without fear of rejection.
Marriages where both manage to be excellent friends have so many things in common that they greatly enjoy each other’s company; they are always looking for the well-being of the other without expecting anything in return.
In true friendship, you can find trust, understanding, encouragement, support, solidarity, laughter, someone to share triumphs and failures with, and a shoulder to cry on. We also look for those who sincerely care, appeal, advise, conversation… and so we can continue with a long list.
Who do you consider? Do you know him much better?
That great friend is or could be our husband; he has to top the best friends list. In the Bible, in the book of Proverbs chapter 17, verse 17, it says, “A friend loves at all times and is like a brother in time of trouble.” if our husband is our best friend, we are sure that we can count on him in those times. There are difficult times in life, and I know he will not abandon me but be there by my side.
Often, couples need to realize the value of being friends between spouses. The Bible says in the Book of Songs chapter 5, verse 16, “Such is my beloved, such is my friend.” once the wife praises the husband for all his qualities, they enjoy being friends all the time.